¿Prometer no empobrece???
Actualizado: 13 ago 2020
Saturado, estresado, abrumado?, Tengo posibilidades para tu mejor manejo, te invito a continuar leyendo.

Bienvenido a mi blog. En este espacio conocerás la forma en que podrás accionar paso a paso y lograr metas altas, así que iniciemos la conversación
Esta mañana me desperté abrumada y sintiendo que mi energía estaba un poco drenada; la cantidad de trabajo que tenía, lo podía explicar...
Dispuesta a trabajar y tomar un café , me encontré en mi correo un mensaje, preguntando por mi nuevo post... Mi nuevo post...que barbaridad..., sé que tengo la fecha encima, solo que estoy saturada, tengo una cantidad enorme de pendientes y el blog ha quedado a un lado...me comprometí a escribir...pero el tiempo no me alcanzó...por qué el día no tiene más horas?
Te suena conocido?, Crees que puedes con todo y no es así?, Sigues aceptando nuevos compromisos?
Te has preguntado ¿por qué te comprometes más allá de tus posibilidades?
Algunos dicen SI, sin haber revisado si tienen la capacidad para responder, otros tienen predisposición a complacer a otros, de ser perfectos o de evitar la tensión de tener que decir que NO o negociar.
Y a ti, que te lleva a sobregirarte?
Trabajamos en exceso para responder a la sobrecarga que tenemos, con la correspondiente presión, ansiedad, fatiga, falta de energía, insatisfacción y quedando mal con los demás; así estamos en la actualidad en las compañías y así viven sus ejecutivos.
La verdad, ni sabemos todo, ni podemos con todo, ni tenemos que complacer a todos; podemos hacer, promesas que podamos cumplir y crear un futuro satisfactorio con otros.
Somos finitos; hacer y manejar nuestras promesas debiera de estar de acuerdo con la capacidad para cumplir lo que prometimos manteniendo una vida saludable y plena.
Este post es una invitación a encontrar Cómo manejar tu capacidad y compromiso y evitar el incumplimiento, tu desgaste, el de tu equipo y el de tu vida familiar.
Reflexionemos, Cuánto es suficiente?
Los resultados parecen siempre demandar más, pero cuánto es suficiente? Corremos el riesgo de poner en problemas nuestra salud, relaciones familiares, la calidad de vida de nuestros hijos...
Hacer más es una estrategia común para el éxito y una práctica frecuente; pero más significa ¿mayor valor?
Nuestros enemigos
Dos enemigos al hacer compromisos son,
La ceguera
El temor
La ceguera, por no ver que estamos saturados y el temor debido a que tenemos que negociar y las personas no ven con buenos ojos lo que sí y no, podemos hacer.
EL PODER DE DECIR NO
Mucha gente tiene dificultad al decir "no" a una petición. Declinar es peligroso o mal visto en muchas organizaciones.
No estamos diciendo que hay que negarse por un asunto de preferencias o conveniencia; necesitamos mantener un estándar de profesionalismo, integridad y compromiso. "No," es apropiado cuando va a producir más ventajas que el haber dicho "sí."
MANEJA TU CAPACIDAD Y COMPROMISO
Solo puedes hacer lo que puedes hacer.
Involucra al equipo para una valoración honesta de lo que pueden o no hacer y a fin de que coordinen los acuerdos basados en esa evaluación.
Algunas estrategias:
· Declina cuando ya estés totalmente comprometido; Si lo tienes que aceptar, tendrás que decidir que no vas a hacer para estar en posibilidades de responder.
· Revoca promesas que ya evaluaste y no vas a poder cumplir; Maneja las consecuencias.
· Difiere el trabajo que puede esperar y asegúrate de que tu cliente esté de acuerdo.
· Transfiere el compromiso a otra persona o área, que si lo pueda atender.
· Delega Recuerda pedirle a integrantes de tu equipo que hagan lo que puedan para apoyar.
· Negocia. Anuncia lo que no podrás hacer y ofrece lo que si harás. Involucra a tus clientes en el diseño de las condiciones de satisfacción, dadas las limitaciones de capacidad.
· Clarifica Prioridades – conversa con tu cliente para definir lo que se tiene que hacer y que puede diferirse o no hacerse, si hay límite de respuesta.
· Levanta una bandera roja y obtén ayuda. Cuando estamos sobre-comprometidos y fallan nuestras posibilidades de cumplir, hay que conversar y reformular acciones para asegurar el resultado.
Cumplir nuestras promesas nos dará una identidad confiable; caer en constantes fallas, nos llevará a una identidad pública negativa...maneja tu capacidad y compromiso porque
PROMETER Y NO CUMPLIR, SI EMPOBRECE.
